
El ascenso al gobierno de los EEUU de un grupo de multimillonarios decididos a torcer la historia a tiros, palos y torturas ha desencadenado un nuevo capítulo del histórico conflicto del Poder Imperial con aquellos que atrae para pagarles bajos salarios y luego pretende expulsar intentando convencer a su pueblo blanco que la causa de la decadencia de los EEUU está en la presencia de estos seres humanos, tan migrantes como los que fundaron el Imperio hace más de doscientos años, aquellos huyendo de la intolerancia religiosa y estos de la crisis económica social que provoca el dominio imperial sobre nuestras riquezas.
Ante las agresivas y prepotentes acciones imperiales no todos se subordinan halagando al amo como Milei o Bukele; los gobiernos de México y Brasil han protestado y buscan condiciones dignas de regreso de sus connacionales y el gobierno de Colombia ha rechazado el ingreso automático de los aviones militares transportando ciudadanos colombianos desatando un enfrentamiento diplomático con los EEUU que honra al mandatario Gustavo Petro y dignifica al pueblo colombiano.
Respaldamos su valiente decisión y apoyamos el llamado a la unidad de los pueblos de América Latina y el Caribe que con reunión formal de sus gobiernos, convocatoria de la CELAC, o sin ella, debemos movilizarnos en defensa de nuestra soberanía contra la pretensión imperial de Trump y la CIA.
Coordinadora Americana por los Derechos de los Pueblos y Victimas de la Prisión Política








